viernes, 19 de junio de 2009

Poema A MI PADRE




A MI PADRE


En este, tu día, el elegido por el mundo para aclamarte, voy a escribir para ti unas sentidas palabras, sin más motivo que el agradecerte por ser como fuiste.


Gracias padre, por haberme concebido

una noche cualquiera, anónima,

sin otro sentimiento que el placer del cuerpo

engrandeciendo tu vanidad de hombre.



Gracias padre, por haber persistido

una y otra vez en el intento

de nombrar “amor” a los engaños del deseo

para no herir la inocencia de mi madre.



Gracias padre, por haberte "sorprendido"

ante la inminencia de mi llegada,

por la delicadeza piadosa de tus excusas

y tu huida final, de amargas lágrimas.



Gracias padre, por un único intento

de arrepentimiento sincero

sin otra esperanza que el verte liberado

del peso indeseado de mi presencia.



Gracias padre, por tu desde entonces

consecuente y sistemático abandono.

Por pintarme en la frente el vocablo “huacha”,

eco infame repetido en mis años primeros.



Gracias padre, por grabar en mi conciencia

la sutil intuición del desarraigo,

la certeza innegable de “no ser” y “no estar”,

sentenciando cada capítulo de mi infancia.



Gracias padre, por tu incansable ausencia,

cuando el despertar de mi adolescencia

trajo nuevas preguntas sobre temores nuevos.

Manos perturbadas reemplazaron las tuyas.



Gracias padre, por sembrar en mí la rabia

y la desconfianza salvadora:

siempre hubo y habrán “hombres” como tú...

que roben indemnes lo que no les pertenece.



Gracias padre, por repetidos años circulares

de desaliento, resignación y odio

sin más resultado que esta variable:

La deformación de un hecho es un accidente .



Gracias padre, por mis fracasados intentos

de creer en la lealtad del amor:

tuyas son las semillas, todo te lo debo a ti.

Tuyo es mi no perdón a la hora de tu muerte.



Gracias padre, en fin, por toda una vida

en pos de tus caricias perdidas,

por cada nuevo reemplazo o sustituto,

por cada despertar con las manos vacías.



¡Gracias padre!, nuevas e inmerecidas gracias

pues no te calza ni siquiera el nombre.

Es... la nada misma, sólo una burla tardía,

la anáfora necesaria en este desesperado exorcismo.





Amanda Espejo 

Quilicura - 25 - junio - 05

martes, 2 de junio de 2009

Poema A LA DISTANCIA




A LA DISTANCIA




Ahora, es justo el tiempo

mi reloj se ha detenido... ( 23.30 Hrs)

y sus manecillas, expectantes, apuntan hacia mí.

Es el momento exacto,

y lo sabes: lo presiento.




Es cierto, ya no estoy sola

arroja tu yugo al tiempo,

no soporto ni un tic-tac

que perturbe mi silencio,

el ritmo, lo llevará mi cuerpo

y los compases, son tu aliento.




Danza amor, ya no estás sólo

por tu cielo va mi viento,

para sacudirte el alma,

para conducir tu cuerpo

a la tierra, boca arriba

que de espaldas yo te espero.




Ríe amor, ya no estás sólo

la distancia es sólo un cuento.

Por hoy, viviré en tus manos

para invocar al dios fuego.

Tú, instálate en mis dedos

y despierta mis secretos.




Siente amor, ya no estás sólo

mi presencia es más que cierto:

huele mi olor en el tuyo

que tu aroma estoy viviendo

y vertientes de humedades

se me brotan desde adentro.




¡Grita amor! Ya no estás sólo

haz el eco a mi lamento

y que estallen los volcanes

que subyacen en el centro

y se disparen las flechas

del deseo satisfecho.




Goza amor, ya no estás sólo

prolonguemos el momento...

Pinta en la noche entera

los destellos del recuerdo

y cómete en las estrellas

los sabores de mis besos.




Amanda Espejo
Quilicura / 2004


Collage: Amanda